Eché de menos el martes que Mourinho se preguntara en sala de prensa ¿por qué? el árbitro turco Çakir había favorecido al Real Madrid al expulsar de manera rigurosa a Nani del Manchester United. El extremo portugués intentó controlar un balón levantando demasiado su pierna derecha. Nani tenía la mirada fija en el esférico, no vio a Arbeloa que venía de atrás a disputar ese mismo balón. Juego peligroso que pudo saldarse con una tarjeta amarilla y el partido no se hubiera roto. O si... pero eso ya nunca lo sabremos. El hecho es que el técnico de Setúbal se apresuró a recordar la expulsión de Pepe hace dos años en semifinales de Champions contra el Barça. Y añadió que Arbeloa no había fingido, dando a entender que Alves si lo había hecho. Esto de utilizar la información al antojo y conveniencia de uno para empeñarse en tener siempre razón tiene un nombre: manipulación.
"Yo no soy hipócrita" dijo hace tiempo en rueda de prensa el Special One. Dime de qué presumes y te diré de qué careces. El martes tuvo la ocasión perfecta de decir "si, el árbitro nos ha beneficiado claramente con esa expulsión". Pero no, claro, se enredó en que si su equipo siempre acaba con 10, que si ganaron gracias a Diego López... Mezclar churras con merinas es algo que se le da de maravilla al técnico del Real Madrid. Y yo voy a ser clara: ayer el equipo blanco ganó al Manchester porque fue más ambicioso sobre el terreno de juego, porque Ferguson decidió dejar a Rooney en el banquillo -¿os imagináis que Roura deja a Messi en el banquillo en la vuelta de la Copa del Rey?-, porque el árbitro perjudicó claramente a los red-devils con la roja a Nani y porque Diego López estuvo de cine.
El fútbol son goles, y el ManU no supo aprovechar las muchas ocasiones claras de gol que tuvo en el Bernabéu y en Old Trafford. En cambio Modric se lució con un golazo de crack y Cristiano demostró que hasta en un día malo acaba decidiendo una eliminatoria. Pero a ver cuando se acepta de una vez que los árbitros también juegan los partidos. Y de la misma manera que una parada de un portero salva un gol o que un fallo de un delantero decide el resultado de un encuentro, el acierto o el error arbitral también influye en la resolución del match. Son los "detalles" de los que hablaba Guardiola. Que a veces juegan a tu favor y a veces lo hacen en tu contra. Y a mi me da igual que se comenten estos fallos de los colegiados, pero lo único que pido es ¡COHERENCIA! Lo que no puede ser es que cuando te favorecen digas que hay que dejar trabajar al árbitro y que cuando te perjudiquen lo invites a irse de copas con el equipo contrario.

Y estas últimas semanas se ha producido el fenómeno del mundo al revés. Los que no hablaban de los árbitros montaron en cólera en el Bernabéu por un penalti clarísimo no pitado. Y los que llevan tres años quejándose sistemáticamente de las actuaciones arbitrales y de conspiraciones de chiste salieron a la zona mixta a dar lecciones de fair-play. Y esto es lo que me enciende, la falta de sentido común, la hipocresía futbolera. Y yo, ante toda esta farsa, sólo acierto a preguntarme: ¿POR QUÉ?
¡No puedo estar más de acuerdo! Te felicito por tu objetividad reconociendo los méritos del Madrid (algo que normalmente no suele hacer el culé), pero también en el análisis de la injusta expulsión.
ResponderEliminarPor cierto, siempre digo lo mismo: incluso en el hipotético caso de que Alves hubiera fingido (sería de Oscar), es roja igualmente por la intención, cosa que no existe en el caso de Nani.
Un saludo culé ;)
www.couriernewdoce.blogspot.com