Por lvar Matusevich: 
Leo Messi no se lesionaba muscularmente hace una eternidad, exactamente desde marzo de 2008, también en Champions pero ante el Celtic. Bolivia se cobra sus víctimas en un margen de diez días y Leo no fue la excepción, pero de ahí a dramatizar, hay un abismo.
Porque lisa y llanamente el Barcelona tiene ganada la liga si no tropieza en los partidos que le queda en el Camp Nou y porque ante el PSG deberá imponerse tal y como lo hizo en la segunda parte de la ida, con un gran Cesc Fábregas y el equipo aplastando y dominando a los chicos de Carlo Ancelotti que, el miércoles que viene, deben salir a ganar porque dos empates lo dejan afuera -0-0 y 1-1- y el 2-2 a la prórroga.
No sucederá porque el FC Barcelona vencerá el duelo y llegará a semifinales por sexta vez consecutiva…mientras Leo descansa de una vez por todas… ante el Mallorca, porque la revacha la juega sí o sí.
Preocupante es la lesión de Mascherano pero definitivamente aclaratoria: el Barça necesita un central más y tener cuatro o cinco variantes para un puesto en el que deberá acudir al rescate el canterano Bartra, buen jugador que se merece nuestra confianza.
Ahora bien, cómo jugar sin Leo Messi se pregunta la multitud. Es muy simple: con tres delanteros o con Cesc de falso nueve, dos soluciones excelentes. Después de todo, este martes acabó jugando la selección campeona del mundo sin Pedro que, por cierto, está a punto de volver.
Cristian Tello es otro de los que pide cancha y Alexis hizo un gran partido en Francia. Por tanto no hay que dramatizar y pensar que Leo merece y necesita un descanso después de la inhumana aventura de Bolivia.
